¿Cómo expresar las condolencias por el fallecimiento de un familiar?

La pérdida de un ser querido, sea familiar o amistad, constituye un golpe muy duro de sobrellevar y superar, en especial si el vínculo con esa persona era muy profundo. A raíz de su dolor, la gente le expresará sus condolencias por fallecimiento de un familiar, pero en otras circunstancias le tocará a usted expresarlas para otras personas que atraviesen el mismo trance.

Sabrá por experiencia que las palabras de consuelo de otras personas durante esos momentos tan difíciles pueden representar un bálsamo para su alma, pero también le pueden sonar igualmente vacías e inútiles por más cargadas de emoción que parezcan. Es que a veces el estado de ánimo tras la muerte de un familiar puede estar tan abatido que ni el afecto de los demás aliviarán su pena, al menos temporalmente.

Si entiende eso, se dará cuenta de que lo mismo que experimenta usted cuando pierde a un ser querido, puede ocurrirle a sus semejantes cuando lo viven en carne propia. Para esos momentos de incertidumbre y dolor en que, pensando en sus propias experiencias, no puede o no sabe qué palabras de condolencias por fallecimiento de un familiar usar, le recomendamos leer estos consejos para utilizar en esos casos. 

1. Hablar del ser querido que acabamos de perder. 

Tanto si es usted el que perdió a un ser querido como si fue una persona cercana, hablar de la persona fallecida en la plenitud de su vida constituye una forma de canalizar la pena. Conviene no guardarse nada en cuestión de sentimientos porque le hará bien desahogarse de tanta angustia, así evitará convertir la pena en depresión o en una angustia patológica.

No se recrimine por aquello que no le pudo expresar personalmente, igual hágalo en donde descansen sus restos. No le podrá responder, pero su nueva forma viviente lo sabrá. Si el difunto no es un familiar suyo pero sí de alguien muy cercano a usted, ofrezca su oído para escuchar, su mente para entender y su corazón para entregar afecto. Aplíquelo para sí mismo y para disminuir el dolor de los demás. 

2. Visite al familiar fallecido en su última morada.

Seguramente su familiar querido fallecido descansará en algún cementerio o conservará sus cenizas dentro de una urna o vasija luego de la cremación. Aunque le cueste al principio, visite la tumba ocupada por su familiar y pase tiempo con él. El aire puro de un cementerio parque lo hará sentirse mejor y menos lejos del difunto. 

Si elige un cementerio ecológico para el descanso eterno de su familiar fallecido, la sensación de ausencia se atenuará con la certeza de que en lugar de morir, su familiar querido ha migrado hacia una nueva forma de vida mucho más sutil y unida con la naturaleza.

3. Poner un altar al difunto o solicitar una ceremonia religiosa por el buen descanso de su alma.

Una buena alternativa para expresar sus condolencias por fallecimiento de un familiar es crearle un altar en su propia casa al difunto, a manera de homenaje, en donde puede encender velas alrededor de una fotografía de la persona, rodearla de flores, rosarios o cartas. 

También puede solicitar (si es creyente) una ceremonia religiosa en la iglesia o capilla más cercana a su domicilio, por el descanso eterno de su alma. El nombre de su familiar fallecido estará incluido dentro de las intenciones de la ceremonia.

4. Enviar cartas o globos al cielo. 

Esta otra alternativa es mucho más simbólica pero no deja de ser un gesto de afecto genuino. Si cree que su familiar fallecido es una estrella más de las que iluminan el firmamento, haga que su cariño llegue lo más alto posible donde su estrella pueda alcanzarlo. 

Para esto, puede enviar cartas en globos al cielo. Escriba la carta, infla un globo con gas y en el cordón con que anuda el mismo enganche la carta. La misma presión del gas lo hará elevarse hasta donde le permitan las corrientes de aire. Repita el proceso todas las veces que su estado anímico lo necesite.

5. Conservar y cuidar las pertenencias del difunto como si fueran las suyas propias.

Muchas personas una vez que despiden a sus familiares difuntos regalan, tiran o empeñan las pertenencias de estos, ya sea porque les ocupa mucho lugar en donde podrían guardar otras cosas, o porque les recuerda constantemente su ausencia. 

Dependiendo del tipo de pertenencia del familiar fallecido, divida lo que ya no seguirá guardando en su casa, como la ropa, a la que le encontrará un destino apropiado, de lo que puede conservar como legado. 

Hay más valor simbólico y afectivo en un juego de copas, un sillón o un espejo que valor monetario en sí. Está comprobado que son más felices las personas que conservan cosas de sus familiares fallecidos que aquellas que se deshacen de ellas.

Estas fueron solo algunas ideas que puede aplicar para expresar las condolencias por fallecimiento de un familiar. Las puede emplear para elaborar mejor su duelo o puede ayudar a personas cercanas a elaborar de la mejor manera el suyo. Sea como sea, no limite sus sentimientos guardándose el afecto o el dolor. Sea humano, llore, grite, reconstrúyase por dentro y sólo después siga avanzando con su vida.