Realizar un testamento le permite evitar litigios o impugnaciones tras su muerte, porque estará presentando un documento legal donde deje constancia de su última voluntad, quiénes serán sus herederos y cuánto le corresponde a cada uno, según sus vínculos o deseos de dejar sus bienes en buenas manos.
Podemos encontrar varios tipos de testamentos que conviene conocer antes de comenzar a elaborar el propio: testamento ológrafo, testamento abierto y testamento cerrado. En esta oportunidad, vamos a enfocarnos en el testamento abierto o público.
El testamento abierto es el acto jurídico en el que el testador da cuenta de sus disposiciones de su última voluntad a sus testigos acerca del destino que ha decidido para sus bienes personales, ya sea en su totalidad o parcial. Esta decisión contempla la revelación de quiénes son los herederos y qué parte de sus bienes le corresponde a cada uno.
Este tipo de testamento debe otorgarse ante notario y tres testigos o bien ante 5 testigos. El Código Civil de Ecuador señala que podrá hacer de notario un juez de lo civil, cuya jurisdicción comprenda el lugar del otorgamiento.
El testamento abierto será presenciado, en todas sus partes, por el testador, por un mismo notario, si lo hubiere, y por unos mismos testigos.
En el testamento abierto se deberán consignar los siguientes datos:
El testamento abierto podrá escribirse anticipadamente. Pero sea que el testador lo tenga escrito o que se escriba en uno o más actos, será leído en su totalidad y en alta voz por el notario, o a falta de él, por uno de los testigos, designado por el testador a este efecto.
Asimismo, mientras el testamento se lee, estará el testador a la vista, y las personas cuya presencia es necesaria escucharán todos los detalles de sus disposiciones.
En caso de que el testador sea ciego, solo podrá otorgar testamento nuncupativo y ante notario o empleado que haga las veces de tal. Su testamento será leído en voz alta dos veces: la primera por el notario o empleado, y la segunda por uno de los testigos, elegido al efecto por el testador. Se hará mención especial de esta solemnidad en el testamento.
Si el testamento no ha sido otorgado ante notario, o ante un juez de primera instancia, sino ante cinco testigos, será necesario que se proceda a su publicación bajo la siguiente formalidad:
El costo de un testamento abierto puede llegar a costar aproximadamente USD $540.
Como habrá advertido, el testamento abierto le permite obtener mayor seguridad que el testamento cerrado, en referente a la parte legal, mas no si usted desea que su última voluntad permanezca en secreto hasta el momento de su muerte, como en el caso del testamento cerrado. Ambos obedecen a las necesidades de cada persona cuando deben decidir qué hacer con los bienes que poseyeron en vida.